...y los "peques" de la Niemeyer 3

    Hoy voy a tratar de dar por finalizado el apartado dedicado a estos pequeños árboles, de los que pudimos disfrutar los asistentes a la Niemeyer.

    Comienzo por mostraros otr composición, presentada en expositor y que constaba de 5 elementos:

    Los sohines que la componían eran cuatro, con una plantita de acento entre la composición principal y el árbol que aparece fuera del expositor. El ejemplar que estaba situado en la parte más alta era un Juniperus chinensis:

    En la parte inmediatamente más baja se situaba esta Piracanta:

    Al lado se encontraba este Eleagnus pungens:

    La plantita de acento:

    Y el árbol situado a la derecha de la composición:

    Otra composición que se pudo ver era esta:

...formada por un grupo de Hayas...

...Una planta de acento que me parece una fresa silvestre...

...y una pequeña Azalea:

    Esta otra composición fue distinguida con una mención de honor:

    La componían una Juniperus, como árbol principal:

...un pequeño helecho:

...y un bonito carpe, con un colorido otoñal muy acorde con la estación:

    Este otro árbol tengo que confesar que es una pequeña debilidad mía. Se trata, probablemente, del brezo más famoso de España y pertenece a mi buen amigo Alberto Baleato (Kingii).

    Creo sinceramente que no se está valorando en su justa medida a este ejemplar en los concursos a los que se está presentando, me da la impresión que para nada se valora la gran dificultad de la especie ni su "rareza". Además no sólo se trata de eso, es, bajo mi punto de vista, un ejemplar sobervio y la verdad es que he visto otros árboles con menciones que tenían menos mérito que él. En fin, repito que es mi opinión personal.
   
    Esta era la planta de acento que lo acompañaba pero que, según me comentoAlberto, no era la que él había enviado para la ocasión.

    Este pequeño Acer buergerianum completaba la composición:

    El conjunto lucía así:

    Bueno, pues con esto termino la exposición de los árboles expuestos en la Sala 1 del Centro Internacional Niemeyer y que, como ya os había comentado, albergaba a los árboles de pequeño tamaño: mames, sohines y tamaño kifu. En la próxima entrada comenzaré a mostraros los "más creciditos".
    Navega raudo el bergantín por tranquilas aguas oceánicas. Un mundo sin descubrir se vislumbra en el horizonte y la tripulación, inquieta ya por pisar tierra, no oculta su impaciencia, sólo el capitán, asido firmemente al timón, parece permanecer tranquilo.