viernes, 29 de agosto de 2014

IV Mostra de bonsái de Moaña II

SUISEKIS

    A mayores de los bonsái, que constituían sin duda el plato fuerte, había también en Moaña una pequeña muestra de suisekis de los que el público pudo disfrutar durante los tres días que duró la muestra. Hay que reconocer que en este apartado todavía queda mucho camino por recorrer, no en vano se trata de una afición minoritaria que, incluso entre los aficionados a los bonsái, tiene pocos adeptos. Concretamente los que se expusieron eran propiedad tan sólo de tres personas, entre los cuales me encuentro. Paso a mostrarlos.

    El primero es ya uno de mi propiedad. Fue la primera piedra importada que compré, debió de ser allá por el año 2.002 creo recordar, y la encontré en Francia. Es de origen chino y el daiza era el que traía de serie.


    La siguiente es una piedra gallega propiedad de Xaime Parada. Tiene una pequeña concavidad capaz de albergar un mínimo de agua. por lo que se la puede considerar como una piedra con estanque.


    La tercera en discordia es un ejemplar encontrado en la playa de Cavío, situada en el ayuntamiento de Ribeira ( A Coruña ). El daiza está construído en madera de sapeli y no sólo es francamente mejorable, sino lo siguiente. Por cierto, a este suiseki le tengo nombre, yo le llamo "el vuelo del colibrí", porque de siempre me ha recordado a una de estas aves volando sobre su nido, una flor...


    El siguiente suiseki no recuerdo de quien era. Se trata de una piedra con forma de montaña.


Ahora os muestro otro ejemplar de mi propiedad que encontré en la montaña palentina. Recuerda a un pez y el daiza está a medio construir. Hemos querido exponerlo así para que el público pudiese ver el proceso de elaboración de la base que sustenta la piedra. Por cierto, que simula pequeñas olas con el fin de ambientar un poco más la composición y lo está realizando Moisés Iglesias.


    El siguiente suiseki pertenece a la colección de Xaime Parada, de Ourense. Es una piedra de Liguria que consiguió a través de Mimo Abate, amigo de él. Ya habíamos tenido ocasión de verla en la pasada edición de la Mostra de Moaña.


    También de Liguria procede el siguiente ejemplar, propiedad de Pablo Iglesias y que recuerda a la forma de una montaña cercana.


    Todavía había otra piedra italiana, también propiedad de Pablo Iglesias. También recuerda la forma de una montaña cercana.


    Sin embargo esta otra, propiedad de Xaime Parada, recuerda a una figura humana envuelta por una túnica o manto.


    Piedra refugio de origen chino. Es de mi colección.


    Creo que la siguiente, con forma de paisaje, es propiedad de Pablo Iglesias.


    De esta tampoco estoy muy seguro sobre su pertenencia, creo en todo caso que es de Xaime Parada. Se trata de una piedra de naturaleza caliza.


    Otra propiedad de Pablo Iglesias.


    La siguiente es una pequeña Furuya ishi, originaria de Japón. La tengo en mi colección desde hace un par de años y cuando la adquirí venía sin daiza, que yo mismo he elaborado en madera de sapeli tintada.


    Y termino el repaso de los suisekis mostrándoos uno bonito, pero de estética totalmente china. También forma parte de mi colección particualar y, más que un suiseki propiamente dicho, podríamos decir que se trata de un shangshi.


    
CAJÓN DE SASTRE

    Como en años anteriores también se ha celebrado un pequeño mercadillo, en el que los aficionados podían comprar, vender o intercambiar material.



    Curiosamente esta ha sido la primera exposición a la que he asistido en la que han sobrado plantas de acento, no en vano se dispuso una pequeña mesa sobre la que se exhibían las descartadas.


    Como en toda exposición de bonsái, si dejamos de lado el acondicionamiento del local y el montaje de las mesas, todo comienza con la recepción de los árboles. En la siguiente imágen vemos a Manuel Abril transportando la ya famosa Erica del compañaero Alberto Baleato "Kingii".


    Claro que la cosa es discutible, pudiéndonos retrotraer todavía a más atrás en el tiempo, concretamente a la hora de salir de casa. Fijaos como se ha anclado el Roble de Manuel Abril para que ocurriesen percances por el camino.


    Al entrar en el local donde va a desarrollarse el evento siempre hay "cosillas" de última hora con las que se hay que poner. En este caso me "cazaron de peluquero". Había que poner al ahijado guapo para que luciese como se merece en su debut ante el público.


    Cuando uno llega a un sitio así y ve todas las mesas todavía vacías no puede dejar de sentir un poco de vértigo. En todo caso por un árbol hay que empezar, así que el primero va para encima de la mesa. Primeros comentarios y miradas curiosas ¡ esto ya comienza a carburar !


    Después de ese primer ejemplar vienen los demás....


...y si tenemos suerte, a veces hasta viene público, jejeje


    Para los despistados de última hora también suele haber solución: no hay nada como una pequeña reseña en la prensa local para animar a que el recinto se llene de curiosos.


    Muchos de estos actos concluyen con el momento "entrega de diplomas". Más que nada lo que trata de hacer la organización es agradecer la participación a todos los coleccionistas que cedieron algún ejemplar para la exposición. Os muestro algunos instantes de este acto.











    Y por último os dejo con una instantánea de algunos de los aficionados que se encargaron de la organización de la IV Mostra de bonsái de Moaña. No están todos, pero si la mayoría de ellos.



    Desde este "Cuaderno de bitácora" les deseamos el mayor de los éxitos de cara al futuro, además de prestarles colaboración para que este evento no decaiga. ¡ Ánimo chicos, a seguir con la labor que habéis iniciado !

    Algunas de las fotos de esta y de la anterior entrada, las que no están rotuladas, se descargaron del Facebook de Julio Fernández, espero que no le importe.

    Juan Liñares

viernes, 22 de agosto de 2014

IV Mostra de bonsái de Moaña I

    Después de un tiempo sin postear, retomo la actrividad del blog para mostraros algunos retazos de lo que ha sido la IV Mostra de bonsái de Moaña, que ha tenido lugar este pasado fin de semana. Este era el cartel anunciador del evento.


    Moaña es un pueblo costero, situado en medio de la península del Morrazo, en plenas Rías Bajas gallegas. 



    Es en esa localidad donde un pequeño grupo de voluntariosos amigos y aficionados al bonsái está trabajando para dar a conocer este arte entre sus vecinos. De hecho se están haciendo gestiones para constituir un nuevo club, que vendría a aumentar el escaso número de ellos que tenemos en Galicia y al cual, si finalmente termina por formarse, deseamos un próspero futuro. Desde luego contará con todo nuestro apoyo para que el proyecto llegue a buen puerto.

    La exposición se viene desarrollando en la parte alta del mercado de abastos de la localidad, que cuenta con una magnífica sala para la correcta exposición de los árboles, con espacios diáfanos, buena luz y un fondo neutro que realza las piezas expuestas. Días antes de la apertura ya se había colgado la pancarta anunciadora del evento.



LOS BONSÁI

    Sin más dilación paso a mostraros las fotos de todas los árboles que se expusieron, en total 28, que no es que sea un número excesivo pero sí que eran los suficientes y de la adecuada calidad como para que justificase cualquier visita.

    Cerca de la entrada, a mano izquierda según se accedía a la misma, lucía esplendoroso el magnífico Roble (Quercus robur) que había servido para la confección del cartel de este año. Su propietario es Manuel Otero Abril que era, sin duda, una de las personas más felices de cuantas acudieron a la muestra, disfrutando de la admiración que su ejemplar causaba entre el público. Le agradezco sobremanera el hecho de que me haya permitido trabajar una pieza de esa calidad, no en vano ahora lo considero "mi ahijado", jejeje. Por cierto, la mesa es obra de Moisés Iglesias, otro de los integrantes de este grupo de aficionados.


    Justo enfrente del roble lucía, también esplendoroso, un bonito bosque de hayas propiedad de Pablo Iglesias.

    
    Un manzano cuajado de frutos, propiedad de Ángel Currás.


    El siguiente es un Fresno ( Fraxinus excelsior), propiedad de Xaime Parada, una pieza que ya habíamos tenido ocasión de contemplar en la pasada edición de esta muestra:


    Ginkgo bilova de Pepe Piñeiro.


    Seguimos con un Olmo chino ( Ulmus parvifolia), propiedad también de Pepe Piñeiro.


    Una especie bastante infrecuente por estas latitudes: Buxus balearica, propiedad de Javier Rebouzas.


    Otro Roble albar de buen porte, en esa ocasión su propietario es Julio Fernández.


    Ahora le toca el turno a un pequeño Acer buergerianum propiedad de Santiago Soleto.


    Una composición mía que creo ya conocéis. Se trata de "La Locura" con la Berchemia acompañándola.


    José Crusat "Choumi" puso su granito de arena trayendo este ejemplar de manzano (Malus everest).


    Un pequeño Olmo chino de tamaño mame. Es propiedad de Javier Rebouzas.


    Pinus sylvestris de Moisés Iglesias. La mesa también ha salido de sus manos.


    Ahora os muestro un Espino de fuego (Piracanta coccinea), propiedad de Javier Rebouzas.


    Ullastre de mi propiedad.


    Este ejemplar de Acer palmatum, propiedad de Fernando Lueiro, tiene un nebari fantástico, su punto fuerte, sin duda.alguna.


    A mi Ciprés de Hinoki creo que ya le conocéis...


    La famosa y siempre bella Erica de Alberto Baleato "Kingii" también ha estado presente.


    Otro Olmo chino. En esta ocasión se trata de un ejemplar en estilo azotado por el viento, propiedad de nuestro compañero José V. San Luís.


    Comenzamos a ver por estas tierras algún ejemplar de Aliso interesante. En esta ocasión pudimos volver a ver el de Julio Fernández, que ya estuviera expuesto en Santiago en el mes de mayo.


    Pablo Iglesias, el propietario del bosque de hayas que ya vimos anteriormente, es también propietario de otro ejemplar de la misma especie, en este caso un árbol en solitario.


    En la muestra de Moaña también tuvimos ocasión de ver un Pinus mugo de tamaño pequeño - mediano, propiedad de José Ignacio Gonzalo.


    Un elegante pino rojo, propiedad de Moisés Iglesias.


    Desde Ourense ha llegado este bonito Acer palmatum, con una copa muy bien formada. Su propietario es Isidro López.


    Xaime Parada, otro representante del club de Ourense, ha traído este ullastre.


    Aunque no se puede considerar un bonsái en sentido estricto, en Moaña pudimos ver una Cyca revoluta, propiedad de Julio Fernández.


    Olivo propiedad de Sergio Portela.


    Un Junípero de vivero, propiedad de Sergio Portela.


    Y termino por hoy con un Acer palmatum "Deshojo", propiedad de Javier Rebouzas.


    Habrá una próxima entrega dedicada a "otras cosas" de esta IV Mostra de Bonsái de Moaña, os espero a todos. Entretanto me voy a relajar contemplando el vaivén de las olas, que mecen suavemente las barquitas del puerto.

    Juan Liñares