La historia que os traigo hoy tiene como protagonista a un Majuelo que puese a la venta en un conocido portal de bonsái. La verdad es que hubo algunas personas que se interesaron por él, pero al final no se concretó la venta.
El ejemplar tiene una buena parte del tronco muerto y con detalles que, a todas luces, parecen interesantes. Mucha de esta zona seca todavía está "sucia", recubierta por corteza que se mantiene adherida a ella. En el momento de ofrecerlo no me pareció adecuado adecentar esa zona, pero la exposición pública es lo que tiene: algún aficionado argumentaba que el ejemplar le gustaba, pero que no sabría que hacer con esa madera sin limpiar. Y en eso trata el trabajo de hoy, en mostraros el proceso que se ha seguido y el resultado final.
El aspecto que presentaba en el momento de ofrecerlo es el que se puede ver a continuación. Ya había brotado.
ENTRÓ CON FUERZA LA PRIMAVERA
El Crataegus parece gozar de mucho vigor y buena prueba de ello es el gran crecimiento que ha experimentado en apenas un par de semanas. Ayudado por un buen programa de abonado el árbol muestra ahora este saludable aspecto.
En Galicia llevábamos desde el otoño con lluvias contínuas. Estos días parece que nos ha dado un respiro el mal tiempo y comienza a lucir el Sol aunque, según las previsiones meteorológicas, por poco tiempo. Esto viene a cuento porque quería haceros notar la diferente tonalidad que presenta el árbol, la corteza y la madera muerta sobre todo, según esté el tiempo húmedo o seco. Volved a mirar las fotos anteriores para daros cuenta.
Como os dije, una de las cosas que primero habría que hacer era eliminar las viejas cortezas adheridas a la madera muerta, mirad por ejemplo este jin.
Esta zona, a medio camino del tronco, también está muerta, será también objeto de la intervención de hoy.
Buena parte de la base del árbol también tiene madera muerta. En concreto, en la imágen que os muestro a continuación, la gruesa raíz que aparece en ella está llena de raicillas por la parte inferior, pero por arriba está seca. También habrá que aactuar a este nivel.
Otro bonito jin que habrá que resaltar con la limpieza.
Visto desde el lado contrario el árbol resalta más su exhuberante vegetación.
En la zona viva también aparecen detalles intereante, como esta hoquedad en forma de hoyuelo.
Otros detalles que también han de ser saneados:
EL TURNO DEL SANEADO
Soy de la opinión de que cuando la madera que queremos resaltar es natural y de calidad lo mejor es no "estropearla" con herramientas eléctricas, que suelen dejar acabados un tanto artificiales, sobre todo porque suelen quedar rastros de la acción de las fresas. Bien es cierto, no obstante, que no en todos los casos basta con una intervención manual, a veces no queda más remedio que echar mano de las máquinas, sobre todo cuando hay importantes zonas a desvastar.
En este caso, toda la madera que tiene este Crataegus tiene interés, así que trabajaré a mano. Para la eliminación de la corteza me he decantado exclusivamente por la utilización de una cuchilla especial, que he adquirido ya hace unos cuantos años y con la que me doy muy bien. Aquí estoy comenzando a retirar la corteza del tronco.
Las zonas que se van descubriendo tienen una tonalidad diferente a las que ya estaban expuesta a la intemperie.
Todavía quedaban muñones sin tratar, restos de la poda de alguna rama.
En este caso, simplemente se rompe con un alicate.
Mientras la zona del tronco que había comenzado a pelar, va quedando al descubierto.
También la zona alta dejaba al descubierto los tesoros que escondía debajo de la corteza.
Otras zonas ya medio peladas por los elementos también destacan en este ejemplar.
A ras de suelo la zona de retirada llega hasta por debajo del nivel del sustrato. Es necesario retirar parte de éste para continuar con el trabajo. El final del mismo siempre termina al encontrar vena viva.
Y poco a poco el trabajo va llegando a su fín.
Detalle de la base una vez pelada.
Y el árbol de cuerpo entero.
Algunos detalles antes de continuar.
Hasta aquí el "rasurado a cuchilla", ahora había que darle una buena ducha para arrastrar los restos que han podido quedar adheridos.
Y comienza una nueva fase, para la que vamos a necesitar un cepillo...
...que no falten una gafas de protección, en este caso un tanto "fashion"...
...y una pistola de agua a presión por impulsos.
Nos colocamos las gafas y comenzamos a proyectar agua sobre la zona tratada para terminar de desincrustar los últimos restos.
Tras esta última operación vuelvo a darle otra ducha al árbol. Siempre quedan minúsculos trocitos de madera y corteza que han sido proyectados incluso contra el follaje.
Luego de dejar secar un rato, justo hasta que la madera esté húmeda pero no empapada, se le aplica el líquido de jin. Al tratarse de un árbol caduco yo suelo utilizar una disolución al 25%, no me gusta que quede tan blanco como una Conífera. El mismo día de la aplicación el tramo tratado preenta aún un velo blanquecino que no ha de durar mucho tiempo.
Como véis, incluso así se aprecian los distintos matices qu presenta la madera, algo que a mi particularmente me gusta. No quiero en estas especies un blanco homogéneo que mate todos esos detalles.
AL DÍA SIGUIENTE
Al trasncurrir un día entero, luego de asegurarme de que todo el polisulfuro ha secado, riego por primera vez la planta después del trabajo. Utilizo manguera e incido especialmente en la zona de madera. Después de esto la vuelvo a dejar secar. Es entonces cuando se aprecian plenamente todos los detalles.
Y finalizo mostrándoos el ejemplar nuevamente al completo. Creo que el cambio ha sido impostante y que ahora sí que destaca esa zona de madera muerta, el principal atractivo de este Majuelo.
Bueno, espero que os haya gustado la entrada de hoy sobre un trabajo tan específico, pero creo que podría ser interesante.
Volveré a poner a la venta el ejemplar, espero que la madera no sea nuevamente un "handicap" en contra. De todos modos ahora que ya está limpito, si no consigo venderlo, ya no me importaría tanto quedarme con él, terminaría formándolo yo mismo.
Os espero de nuevo cuando este viejo casacarón vuelva a surcar los mares del bonsái. ¡ No faltéis !
Juan Liñares
Me sorprende que no lo hubieras vendido antes. Sinceramente, cuando lo vi, me pareció una gran relación calidad-precio. Supongo que ahora te será aún más fácil venderlo.
ResponderEliminarSaludos y suerte con la venta
Bueno Marcos,ya sabes como está la cosa, hace unos años una pieza como esta te la sacaban de las manos pero los tiempos han cambiado. Precisamente si le he trabajado la madera ha sido con el fin de que sea más fácil poderlo vender.
EliminarUn abrazo y gracias por dejar tu comentario
otro dia intenta hacer alguna foto para que veamos lo que explicas....jajjajajja.....que bien resuelto todo,así da gusto ver un blog.
ResponderEliminarun abrazo
Muchas gracias Madera, en cuanto a las fotos, siempre me gusta apoyarme mucho en la fotografía. Este es un arte basicamente visual y creo que se transmite mejor con imágenes que con palabras, por eso hago tantas. Te puedo decir que siempre selecciono las que cuelgo y descarto, en muchos casos, tres o cuatro por cada una que muestro.
EliminarUn abrazo y agradecido por tu participación
pues ahora lo vendes fijo, porque a parte que ha quedado muy bien, quien no sepa tratar la madera, entre que ya está hecho y las explicaciones que has dado......no hay pegas......ó si, como dice madera que no pones fotos.......jajaja
ResponderEliminarfelicidades por esta nueva entrada tan buena
un abrazo
Gracias Rosana, no sé yo si la cuestión de que se venda o no dependerá tanto de la calidad del material como de la disponibilidad de dinero. Si es por esta última causa, aunque le colgase una cadena de oro, no sé yo si se vendería.
EliminarMuchas gracias por entrar y dejar tu comentario.
Una entrada perfecta, muy bien explicado el trabajo de madera y con unas fotos perfectas para ver bien todo el proceso según lo vas contando. Cuando he leído el titulo "Maderitas" he pensado que ibas a hablarnos de algo mas pequeñito, me encanta empezar así el fin de semana. Entradas así hacen que espere la siguiente con verdaderas ganas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Querida Loli, comentarios como el tuyo son los que alimentan mis ganas de continuar con todo este trabajo divulgativo. Muchísismas gracias por ensalzar la entrada, me alegro de que te guste, de que te encante empezar así el fin de semana y de que esperes ansiosa la siguiente entrada.
EliminarUn abrazo y gracias por estar ahí, tú siempre lo estás, eres la caña.
Ahora seguro que el trabajo de madera no será un obstáculo para que lo vendas. Es más, seguro que se pelean por él... Ha quedado de lujo. La entrada, como siempre, cuidadísima. Es de agradecer el trabajo que te tomas para compartir y enseñar estos trabajos. Muchas gracias.
ResponderEliminarUn abrazo, amigo, y abrígate que nos vuelve el invierno por estos lares.
Bueno César, a ver que pasa. Muchas gracias por saber apreciar el gran esfuerzo que supone la elaboración de cada una de las entradas, lo agradezco de corazón.
EliminarUn abrazo, sí que ha entrado otra vez el frío ¡vaya tiempecito, por Dios!
Seguro que le salen multitud de novias a este espino. Y al que decía que no sabia que hacer con la madera muerta... pues ya lo tiene claro... conservarla que ha quedado genial!!
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Fran, a ver si ahora entra más por el ojo derecho.
EliminarUn saludo y gracias por participar en el blog
Buen trabajo en todos los sentidos.
ResponderEliminarTécnico, explicativo, de vision...
Enhorabuena, gracias y un abrazo
Muchas gracias Salva, viniendo de ti lo considero un gran halago.
EliminarUn abrazo y gracias por participar
Como todas tus entradas , muy didáctica y clara. Esta creo que me la guardo en un lugar especial , porque yo soy uno de esos que no saben tratar la madera, mas que tratar, darle ese toque de naturalidad para que no resalte en exceso, yo seguro que le hubiese metido la dremel sin pensar que al natural es mejor.
ResponderEliminarUn saludo y suerte con la venta
Muchas gracias Gonzalo, si la entrada te ha servido de algo me alegro mucho. Muchas veces es difícil contenerse, pero meter máquinas a una madera con un acabado natural tan marcado casi es un sacrilegio.
EliminarUn abrazo y gracias por participar.
Amigo Juan en tu línea, fantástico, me encanta esta especie, a ver si le hinco el diente que no tengo buena experiencia con ella. Un abrazo
ResponderEliminarTodo es cuestión de volverlo a intentar eisha, porque yo conozco a aficionados anadaluces que, tras experimentar con ellos durante un tiempo, ahora los mantienen si demasiados problemas. Reconozco que el clima norteño tal vez juegue a nuestro favor con esta especie, ahí teneis que "mimarlos" más.
EliminarUn abrazo y no tires la toalla, ¡prueva de nuevo!
Un trabajo estupendo y como siempre muy bien explicado, enseñando las herramientas, los pasos uno a uno... Un lujo
ResponderEliminarMuchas gracias
Muchísismas gracias Daniel, me alegro de que te haya gustado la entrada, y eso que estuve meditándolo mucho porque no estaba yo muy seguro de que pudiese ser un trabajo interesante para mostar.
EliminarSaludos y gracias por dejar tus impresiones.
No sé si lo venderás, pero si he visto que has pasado un rato muy placentero y sobre todo que has querido compartir, de nuevo GRACIAS POR ELLO.
ResponderEliminarSigo, que se vá el barco....
Hombre Arbolito,la verdad es sque yo disfruto con cualquier trabajo que le hago a mis árboles, por modestos que sean. Cuando uno tiene el gusanillo metido detntro ya sabes que hay que darle su dosis diaria de droga.
EliminarUn abrazo, gracias por estar ahí.
Muy didáctica tu entrada. Gracias por publicarla.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias Carlos, me alegro de que te haya resultado entretenida.
EliminarUn saludo y gracias por navegar conmigo.
Buen reportaje como siempre Capitán.Me gusta el trabajo, buena madera,tiene mucha naturalidad la madera trabajada a mano,esos detalles naturales que le dan mucha calidad.
ResponderEliminarSeguro que tendrá mucha aceptación ahora con esos trabajos. suerte con la venta.
Esperamos otra travesía desde esté muelle.
saludos.
Gracias Abril, ahora vamos a ver la aceptación que tiene. Tendrá que pasar nuevamente por la prueba de fuego.
EliminarUn abrazo y no pierdas de vista el barco por si decidimos zarpar nuevamnte.
Muy acertada la decisión de no tocar la madera con maquina, pues se estropearía toda la belleza natural que has puesto al descubierto. Buen trabajo, si señor.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Martín, en este caso he creído conveniente no alterar la forma natural de la madera, al menos a mí me parece mucho más interesante. Luego, si cambia de propietario que el decida lo que hacer.
EliminarUn saludo y gracias por tu comentario.
Mi querido amigo... mi admirado maestro....
ResponderEliminarA este alumno de 1º de EGB en esta asignatura llamada bonsai, que tanto aprende de este "cuaderno", le apetece corregirle en una cosina......
En ese trabajo de madera, a veces con bichitos diminutos debajo y todo lo que tú sabes mejor que nadie, todo lo arrancado y cepillado va al sustrato, cuando no a las raíces.....
No tendrás algún amigo que te haya regalado quizá un "babero" para colocar atado al tronco y al terminar la faena, retirar y punto?????
Te doy pistasssssssss, alguno de Asturiasssssss, que le encanta la sidraaaaaaaa, también les muyeresssssss, que se llame yoyooooooooo
Me encanta hacerte sonreir, amigo JUan.
Un abrazo.
Mi bien querido amigo asturiano, mujeriego y bebedor de sidra, sepa usted que efectivamente conservo esa tela protectora de la que me habla, pero recuerde que tengo la colección dividida en dos ubicaciones distintas. Coincidió, sin más, que el "babero", estaba en el otro lado.
EliminarUn abrazo campeón, deja alguna para mí...me refiero a la sidra, que lo de las muyeres ya sé que es una bravuconada, jajaja. ¿Es tonto Yoyo, es tonto Yoyo? jajaja.
Un abrazo y cuida lo que tienes, no sigas buscando.
Sigo yo.
ResponderEliminarY que los hace sui madre con la tela de un paraguas viejo jejeje.
Como siempre una explicación muy pormenorizada y muy didáctica. Tus seguidores, "alumnos", "grumetesa" te lo agradecemos.
El árbol quedó precioso y creo que con futuro. Suerte con la venta.
Un abrazo.
Oye Antoce, yo que los hacía con la tela de un paraguas no lo sabía, pero sí es cierto que tiene esa textura típica. En fin ¡nunca te acostarás sin aprender algo más!
EliminarUn abrazo y gracias por el apunte
Gran trabajo didáctico como siempre y además el resultado natural
ResponderEliminarGracias Santi, eso que comentas es justo el resultado que quería conseguir.
EliminarUn abrazo y ya sabes como encontrarme.
Impresionante trabajo. El trabajo en la madera muy bueno. De forma artesanal todo es mejor.
ResponderEliminarLa entrada, como siempre muy didáctica. Un lujo seguir tu blog.
Un abrazo
Muchísimas gracias por tus palabras Ishi, las agradezco de verdad. Para aficionados como tú sí que es un lujo escribir las experiencias que va teniendo uno en este mundillo.
EliminarUn abrazo, agradezco tu intervención.
Muy buen trabajo y como siempre muy generoso en explicaciones y detalles. Aprovecho este medio para agradecerte tu generosidad en los comentarios de los arbolitos que he presentado al concurso del Tim y a tu "me gusta". Gracias.
ResponderEliminarGracias Antonio por los halagos. En cuanto a tus candidaturas al Concurso del TIM ¿qué decir?, la verdad es que hay un buen número de árboles merecedores de un reconocimiento. En tu caso valoré mucho el hecho de haber partido de material francamente humilde y haber conseguido con trabajao, tesón y tiempo, unos bonsái francamente muy convincentes.
EliminarUn abrazo y suerte en el concurso.
no viene al caso, pero lo de la tela del paraguas lo copiaré.....jaja, la próxima vez cuando esté roto no lo tiro
ResponderEliminarsaludos a tod@s.
buen trabajo, Juan, seguro que ahora lo vendes
ResponderEliminarPues ya lo he puesto nuevamente a la venta y no te creas tú que ha habido mucha gente interesada. Lo he vendido ya, pero la cosa está muy mal cuando nadie se anima ni a preguntar.
EliminarUn abrazo y gracias por leerme